El Buebito

Esta experiencia tiene un valor sentimental junto a mi padre con quien decidimos comprar este auto que no encendia y estaba por arreglarse muchas partes internas, externas y mecánicas; fue un carro proyecto pues somos apasionados por arreglar y reparar cosas, nos gustan los autos y en especial este, un corsa wind que tiene forma de huevito y por ende el nombre de Buebito porque siempre le cambiamos algunas letras a las palabras para identificar las cosas, es como una tradición familiar. Como no encendía, tuvimos que llevarlo en grúa, una vez llegado a la casa lo empezamos a desarmar y se inició por los frenos, pues no giraban bien las ruedas, y desde el día 1 fue cuando la utilización del WD-40 era lo esencial para poder destrabar, aflojar y desatornillar los pernos que por mucho tiempo pasaron oxidandose, como se ve en la imagen del tambor de freno del vehiculo, al fondo está presente la lata de WD-40; seguido de ello, lo desarmamos por completo en la parte interior para reubicar sus piezas en los lugares correspondientes y para cada perno que no se dejaba aflojar, el WD-40 era el líquido mágico que nos ayudaba. Hasta que a la final logramos hacerlo andar, lo pusimos como nos gusta mantener los autos, y espero pueda ser la reliquia familiar y el más hermoso recuerdo junto a mi padre.